Me retiré a la oscuri dad, para evitar que se dieran cuenta de la clase de gobernador al que estaban sometidos, y llamé al capitá n para que se acercase hasta donde yo estaba.
Y ya me dijeron, es que tú no vivías aquí y fue, ah cabrón, como que se me bajó la peda, agarré la onda y efectivamente no vivía ahí, entonces humildemente retiré mis cosas y me fui.