Pero ella, temiendo que estuviesen jugando fuerte, no aceptó, y, utilizando a su hermana como excusa, dijo que se entretendría con un libro durante el poco tiempo que podría permanecer abajo.
El ganar o perder el partido mañana, no va a depender de lo que pase en la grada, si no de lo que pase en el campo, que es lo que nos tiene que ocupar a nosotros.