Sin embargo el origen del reloj de arena es incierto, aunque a comienzos del sigo XIV, el reloj de arena era comúnmente usado especialmente a bordo de los barcos.
Los relojes de arena contienen arena muy fina que pasa por un orificio a una velocidad constante e indica un periodo de tiempo determinado por el paso de la arena a través de éste.
Muchos dispositivos han sido usados con el paso del tiempo para estimar su paso: por ejemplo velas y baras de incienso que se consumen a una velocidad estimada, usadas junto con el reloj de arena.
Imaginaos un reloj de arena: en la parte de arriba, tengo todo carbono-14 Según pasa el tiempo, como se va convirtiendo en carbono-12, pasa a la parte de abajo del reloj de abajo.