Bernarda lo pensó mientras tomaba antes de acostarse su sexto baño caliente con jabones fragantes, y cuando regresó al dormitorio ya lo había olvidado.
En el coronel Dionisio Tabares se cumplieron las diversas etapas: al principio recordó que Damián obró como un cobarde; luego, lo olvidó totalmente; luego, recordó su impetuosa muerte.